Desde ASCA, y antes de iniciar el nuevo proceso negociador del plan de igualdad, hemos planteado una serie de cuestiones que consideramos urgentes y fundamentales para garantizar el cumplimiento de los acuerdos vigentes y la protección de los derechos de la plantilla.
- Incumplimientos en el acuerdo de horarios
En relación con el acuerdo firmado en junio de 2024 sobre “horarios y otras materias”, denunciamos que se está incumpliendo de forma sistemática lo pactado. El acuerdo establece claramente que:
- Se trabajará una tarde fija por semana.
- La empresa podrá disponer de una segunda tarde, únicamente con preaviso mínimo de 48 horas .
Preaviso contrario al Estatuto de los trabajadores.
Además, en oficinas con menos de tres personas, no se permite la coincidencia de la tarde fija entre Dirección y Subdirección, ignorando por completo los riesgos de seguridad.
//Abanca, Sib-Fine y UGT NO han dado respuesta alguna.
La aplicación en materia de horarios está siendo contraria al espíritu del acuerdo vigente en materia de horarios.
- Traslados y reunificación familiar
El punto 7.2 del actual plan de igualdad establece que, siempre que existan vacantes, se dará prioridad a situaciones como embarazo, cuidado de menores, dependencia, enfermedad de familiares y reunificación familiar.
En la provincia de Coruña hemos detectado casos en los que estas prioridades no se han respetado, donde a pesar de existir vacantes, estas han sido cubiertas sin tener en cuenta las peticiones realizadas por el personal, obviando los acuerdos establecidos. Además, en esta provincia se les está trasladando que, para acceder a estos traslados, los responsables los condicionen a la obtención de resultados.
- Exigencias desproporcionadas y salud laboral
Se está exigiendo un rendimiento del 120%, 150% o incluso 200%, sin criterios objetivos ni consideración por las circunstancias personales (reducciones de jornada, tratamientos psicológicos,…)
Queremos dejar claro:
- Estas prácticas constituyen acoso laboral disfrazado de exigencia.
- Están teniendo consecuencias graves para la salud de la plantilla
Mientras no se produzca un cambio real en las actitudes directivas y se garantice el respeto a los derechos acordados, la implementación del Plan de Igualdad seguirá siendo una meta lejana. Desde ASCA reiteramos la urgente necesidad de medidas concretas que aseguren coherencia entre el discurso institucional y las prácticas reales.