En medio del excepcional estado de alarma en el que estamos inmersos a cuenta del COVID19 la empresa ha conseguido lo que quería. Ni más ni menos que sacar adelante un “acuerdo” que no era ni prioritario ni urgente, y hacerlo, además, avalado por los sindicatos mayoritarios. Se firmo el 14 de abril de 2020 por la tarde, en periodo informal de negociaciones. Y ahora continúan con el paripé para darle formalidad.

ASCA ha criticado la forma en la que se ha llevado a cabo pidiendo formalmente y en reiteradas ocasiones la paralización del mismo.

Tras la consiguiente consulta a los afiliados de ASCA y el contundente NO que ha salido de la votación, este sindicato no suscribirá este “no ERE”. Entre otras cosas, porque ni siquiera el Informe Técnico presentado lo justifica.

Extinción del contrato por mutuo acuerdo: denominadas “Prejubilaciones”:

Tanto el número de plazas como las compensaciones a las personas que se acojan a la prejubilación nos parecen insuficientes y poco proporcionadas, además de ser al arbitrio de la empresa.
La Tributación fiscal será de las más altas para aquellos que decidan el cobro íntegro, y para aquellos que lo cobren mensualmente verán incrementadas sus bases de cotización por el incremento de la percepción para el pago a la SS. (Pendiente de solventar esa incidencia fiscal por la parte empresarial. Inaudito).
Incertidumbre en el importe de cobro de la pensión futura y en la edad a la que se pueda jubilar.
Sin derecho a Prestación por Desempleo, puesto que se ha negociado por la vía de extinciones de mutuo acuerdo de las partes.

Movilidad geográfica:

Para los que acepten el traslado: condiciones de pago por debajo de Convenio.
Despidos forzosos para los trabajadores que no lo acepten.

Horarios de trabajo:

Para ASCA, el horario válido es el que teníamos antes del acuerdo del 26-12-2014 (modificación sustancial de condiciones de trabajo, negociado y firmado por los mismos que aceptan este acuerdo). Ni en aquel momento había motivo para modificarlo y mucho menos ahora. No entramos a negociar este extremo.
Nuestra negativa más enérgica en la modificación de horarios a flexible para 550 trabajadores, cuya elección será para quien la empresa designe.

El acuerdo lo valoramos en su conjunto, y que cada uno lo haga en la parte que le toque.

¿Qué han negociado?, ¿Qué ha obtenido la plantilla?: NADA de NADA.  

Manos que no dais, ¿qué esperáis?